Con su nuevo álbum «Idols», Yungblud continúa trazando su propio camino en el sonido alternativo moderno, con un lanzamiento más maduro, teatral y cargado de emociones que nunca. El artista británico, conocido por su energía y sensibilidad, presenta una obra que se mueve entre la rabia, la ternura y la búsqueda interior, dotada de intensidad cinematográfica y coherencia narrativa.
El álbum se abre con la épica «Hello Heaven, Hello», una canción de nueve minutos que actúa como puerta de entrada al universo emocional del álbum. Desde el primer momento, Yungblud despliega su mundo interior en un estado de ánimo melancólico, casi revelador.
A esto le sigue «Ídolos Pt. Yo», donde el artista se coloca frente a sus héroes personales y colectivos, mientras que en «Lovesick Lullaby» regresa al romanticismo, envuelto en una oscura ironía. «Zombie», con su energía punk y su borde lírico, destaca por su crítica social, al igual que la dramatúrgica «The Greatest Parade», donde Yungblud describe la futilidad moderna como una procesión de fantasmas.
«Change» combina la estética pop con una sincera reflexión política, mientras que «Monday Murder» aporta un enfoque más desnudo y crudo. La onírica y espeluznante «Ghosts» con una duración superior a los seis minutos, ofrece una pausa existencial entre el fuego y la guerra de las siguientes canciones.
«Fire» es un grito de redención, mientras que «War» alcanza su punto máximo de intensidad en el álbum, enfrentando los mundos interior y exterior del artista. «Idols Pt. II» actúa como epílogo y al mismo tiempo como transición a la última canción, la atmosférica y casi psicodélica «Supermoon».
La versión japonesa del álbum también incluye «Abyss», una adición corta pero robusta, que mejora la coherencia temática de «Idols» y les da a los fanáticos otra razón para buscar la edición especial.
Con «Ídolos», Yungblud no se contenta con repetir lo que ya sabemos de él. Empuja los límites de su sonido e identidad, ofreciendo un álbum que es a la vez un diario personal, una declaración política y un salto artístico.